Sesión extraordinaria del día primero de octubre de mil novecientos diecisiete.

A las 10 a.m. reunidos en el Salón de sesiones los Ciudadanos de la Vega, García, Pérez Andrade, Aguayo, Navarro, Jiménez y Llerenas, miembros de este H. Ayuntamiento, dio principio la sesión con la exposición del motivo que el ciudadano Presidente de la Vega tuvo para convocar a ella, siendo este informar a la H Corporación que ayer en la tarde un grupo de individuos del pueblo capitaneados por el Profesor J. Guadalupe Vargas se presentaron ante este Edificio con objeto de exponer al Ciudadano Gobernador que querían maíz barato y trabajo según lo expresó el ciado Profesor Vargas a lo que el Ejecutivo dio la contestación que el caso requería con lo cual aparentemente quedaron satisfechos los manifestantes, habiéndose retirado pacíficamente, pero que como a las 8 de esa misma noche se recibió aviso en la Oficina de la Presidencia Municipal de que reorganizados de nuevo algunos elementos desordenados andaban por el barrio de la “Sangre de Cristo” en actitud agresiva al Gobierno, profiriendo frases despectivas y con intenciones de penetrar a los domicilios particulares en donde suponían hubiese existencias de maíz para apoderarse de él por la fuerza bruta, que en vista de esto y de acuerdo con el ejecutivo del Estado se dispuso se adquiriera violentamente alguna partida de maíz que fuese vendida a precio bajo con el fin de evitar atropellos; que el Ciudadano J. Jesús Castañeda puso a su disposición la existencia de ese cereal que quedaba en sus bodegas el cual fue vendido y agotado en termino de 2 horas al precio de $0.55 por una comisión de Ciudadanos encabezada por el manifestante Profesor Vargas; que no obstante la oportuna y en su concepto acertada medida que se tomó, con pena manifiesto a esta H. Corporación que durante esa misma noche se registraron por los barrios del noreste de la población algunos saqueos y desórdenes con lo cual palpablemente se ve que no es realidad lo expuesto por los manifestantes sobre su extrema necesidad de adquirir maíz sino pretexto para entregarse al pillaje y hacer labor obstruccionista al Gobierno construido. En todos los lugares donde tuvo conocimiento de desórdenes se presentó acompañado de agentes de la policía y pidió guardias militares para reforzar la vigilancia obteniendo el resultado satisfactorio de calmar la agitación popular. Que bien comprende que el precio a que en la actualidad están vendiendo los comerciantes de la localidad el maíz es excesivamente caro y no está al alcance de muchas familias que quizá calladamente sufren s necesidad y que hay que atenderlas y cumplir con el deber de remediarles hasta donde esté al alcance del H. Ayuntamiento, proporcionándoles el modo de vivir; pidiendo a la Corporación sea discutida de manera violenta las medidas que deban adoptarse para calmar en parte la aflictiva situación a los habitantes de esta localidad.

Puesto a discusión el Ciudadano Jiménez propone se adquiera de donde lo haya y a cualquier precio el maíz que sea necesario y que sea vendido al precio que esté al alcance del consumidor, pero en la forma de masa molida, pues como maíz hay el inconveniente de que trafican indebidamente con él.

El Ciudadano Pérez Andrade está conforme y de acuerdo en lo indicado por Jiménez y pide se nombre una comisión para que arregle lo conducente a la molienda y expendio.

El Ciudadano Llerenas se adhiere a lo anteriormente expuesto propone se comisione a los Ciudadanos Bracamontes, Aguayo y Arregui para tal objeto y que se faculte a la Presidencia para que de acuerdo con la comisión haga las gestiones que sean necesarias para adquirir maíz y disponga la venta de masa al precio que juzguen conveniente y se cargue en los libros de la Tesorería Municipal con cargo a la partida de “gastos extraordinarios” el déficit que resulte en la operación, puesto que tratándose de un fin tan noble y de resultado satisfactorio y que no implica una cantidad excesiva, puesto que están ya próximas las cosechas y no tardará en haber maíz nuevo.

Los demás Munícipes presentes manifestaron su conformidad con todo lo anteriormente expuesto y sin más asunto de que tratar se levantó la sesión.

Arcadio de la Vega

J. Guadalupe Michel, Secretario.