Sesi贸n extraordinaria del d铆a trece de mayo de mil novecientos dieciocho.
Asistencia de los ciudadanos Alc谩zar, Ibarra, Mart铆nez, Suro, D铆az y G贸mez Guerra.
Abierta la sesi贸n, la Secretar铆a dio a conocer a los ciudadanos mun铆cipes, por indicaci贸n del ciudadano presidente, que el objeto de esta sesi贸n extraordinaria a que se hab铆a convocado, era con el fin de tratar importantes asuntos relativos a la huelga de los profesores, dependientes de este municipio.
A moci贸n del mismo ciudadano presidente municipal y para ilustraci贸n de los ciudadanos mun铆cipes en este asunto, se acord贸 que los ciudadanos jefe del Departamento Educativo e inspector pedag贸gico del Estado estuvieran presentes en esta sesi贸n y tomaran parte en las discusiones, invit谩ndoseles en seguida.
El ciudadano Suro pidi贸 al ciudadano presidente la explicaci贸n de este asunto. Se la dio, manifestando la opini贸n de los ciudadanos Ibarra y D铆az, relativas a que no eran de substituirse a los profesores huelguistas y de que se les convocara al sal贸n de sesiones para tener con ellos una entrevista y arreglo satisfactorio del conflicto surgido.
El ciudadano G贸mez Guerra propuso se volviera a hacer una excitativa a dichos profesores, haci茅ndoles ver que perder谩n su empleo pag谩ndoseles hasta que las circunstancias lo permitan, dando preferencia al pago de los que contin煤en en sus labores, perdiendo tambi茅n el sueldo de las vacaciones.
El ciudadano Suro se adhiri贸 a la opini贸n del ciudadano G贸mez Guerra y se consult贸 al ciudadano Barbosa, director de Educaci贸n, su opini贸n, y dijo: que desear铆a o铆r la de los dem谩s mun铆cipes.
Pidi贸 la palabra el ciudadano Ibarra, y concedida que le fue manifest贸: que el ciudadano jefe del Departamento de Educaci贸n P煤blica y el inspector pedag贸gico del Estado, eran responsables de la huelga de los profesores y que los acusaba como tales en virtud de no haber intervenido como jefe e inspector inmediato de ellos, para sofocar la huelga a su debido tiempo.
El ciudadano Barbosa pidiendo el uso de la palabra y concedida 茅sta, manifest贸: que no se adher铆a a la opini贸n de los huelguistas y que no concurri贸 a las juntas de los profesores porque no se le invit贸 y que protestaba de los cargos que le hac铆a el ciudadano Ibarra, los cuales no podr铆a probarle.
El ciudadano Castrej贸n pidi贸 el uso de la palabra y concedida, expuso: que ha sido siempre de parte del orden y que su actitud ha sido por lo mismo siempre de parte del profesorado ordenado y no del insubordinado y que no admit铆a el cargo que se hace por el ciudadano Ibarra.
El ciudadano Ibarra manifest贸: que el ciudadano Barbosa es responsable porque debi贸 haber comunicado este movimiento inmediatamente al H. Ayuntamiento, lo que no hizo, quedando as铆 comprobado su dicho; y que el ciudadano Castrej贸n que se somete al gobierno no reconociendo al profesorado, tampoco 茅ste reconoce en el ciudadano Castrej贸n como profesor la ingerencia (sic) que ha tomado para solucionar este conflicto y que 茅l se va por la justicia y no por los gobiernos y que no ha detenido a la multitud, donde siempre est谩 la justicia.
El ciudadano Castrej贸n contest贸 que la mayor铆a de los profesores eran la pac铆fica y no la huelguista; luego聟(sic)
El ciudadano G贸mez Guerra volvi贸 a insistir en su proposici贸n anterior y el ciudadano presidente municipal dirigi茅ndose al ciudadano D铆az le pidi贸 explicaci贸n de los hechos, quien a su vez la hizo y es la conocida por la mayor parte de los mun铆cipes presentes.
El ciudadano Ibarra manifest贸: que est谩 de parte del Ayuntamiento y que no habi茅ndosele hecho caso, contestaba con el adagio vulgar: palabras necias, o铆dos sordos.
El ciudadano G贸mez Guerra pidi贸 explicaci贸n al ciudadano Ibarra de lo que acababa de decir y el ciudadano Ibarra volvi贸 a repetir las dos proposiciones que hizo en la sesi贸n del viernes pr贸ximo pasado, faltando la explicaci贸n de que estas proposiciones se hicieran al representante de los huelguistas, quien no las acept贸 por no tener autorizaci贸n de ellos, qued谩ndose en consecuencia en pie su determinaci贸n de que si para el d铆a 12 doce del actual a las 12 meridiano no se les liquidaba, ni un minuto m谩s trabajar铆an, suspendiendo las labores; y que como no hab铆a sido posible conseguir el dinero necesario para hacerse el pago que se reclamaba, era de aceptarse la suspensi贸n de sus labores.
El ciudadano Castrej贸n dio cuenta con el resultado de la comisi贸n que le confi贸 el ciudadano presidente de este H. Ayuntamiento y manifest贸: que habi茅ndose acercado con algunos profesores huelguistas le manifestaron que hab铆an firmado por adherirse a la opini贸n de los dem谩s, habiendo sido arrastrados a la huelga, comprobando su dicho.
El ciudadano Ibarra en t茅rminos poco comedidos para los ciudadanos, Director e Inspector de Educaci贸n, manifest贸 que no han hecho nada en favor del H. Ayuntamiento por no haber impedido a su debido tiempo la huelga y que no serv铆an para nada聟 (sic)
Manifest贸, adem谩s, que la huelga se pod铆a haber impedido invitando a los profesores huelguistas al sal贸n de este H. Ayuntamiento y que, habl谩ndoles y demostr谩ndoles todo lo que ha pasado, aseguraba quedar铆a terminado el conflicto.
Refiri茅ndose al caso de que los profesores hab铆an sido arrastrados, manifest贸 ex particularibus nill inde secuetior (sic) que de un caso particular que se citaba no pod铆a deducirse que todos los huelguistas hab铆an sido arrastrados.
El ciudadano presidente municipal manifest贸 que en lo particular se les hab铆a excitado a cada uno de dichos profesores huelguistas a que continuaran en sus labores escolares y que no hab铆a conseguido nada y que en la junta tenida a las 12 meridiano de este d铆a se hab铆a acordado esta determinaci贸n.
El ciudadano D铆az dijo que en la noche de hoy, momentos antes de la hora de sesi贸n, hab铆a tenido la oportunidad de hablar con un grupo de profesores huelguistas, los que estaban dispuestos a continuar en sus labores.
El ciudadano Ibarra manifest贸: que eso era lo que deseaba el ciudadano Castrej贸n y que esto se hab铆a de haber hecho a su debido tiempo y no ahora que ya se declar贸 la huelga.
El ciudadano G贸mez Guerra manifest贸 que: se perjudicar铆a m谩s la ni帽ez substituyendo a los profesores huelguistas que el que siguieran los mismos: que se les convenciera con palabras comedidas, tanto para unos como para otros, y que 茅sta ser铆a la mejor manera de solucionar el conflicto surgido ante el profesorado.
El ciudadano Ibarra manifest贸: que al ciudadano Alc谩zar, al jefe de Educaci贸n P煤blica, al inspector pedag贸gico, al ciudadano gobernador y a otras personas les constaba el cuadro lastimoso que se vio en la ma帽ana de este d铆a en una escuela en que un grupo de alumnas lloraban a l谩grima viva por la separaci贸n de su maestra y que les hab铆a llamado la atenci贸n sobre este particular.
El ciudadano presidente municipal reproch贸 al ciudadano Ibarra por el sentido rimbombante con que hab铆a hecho su narraci贸n.
El ciudadano Barbosa manifest贸: que el ciudadano Ibarra no le hab铆a probado a煤n los cargos que le hab铆a hecho al principio de la discusi贸n y que, refiri茅ndose a la exposici贸n que hizo del cuadro lastimoso que hab铆a visto en una escuela, dijo: que se asustaba al ciudadano Ibarra de ver llorar a las alumnas porque iba a ser substituida su profesora, y que as铆 tambi茅n se lloraba a un soldado que es muerto en combate por la bala enemiga pero no obstante es substituido por otro soldado.
El ciudadano Castrej贸n manifest贸: que era m谩s conveniente substituir a los profesores huelguistas que obligarlos a volver a sus labores. Con lo que estuvieron de acuerdo los ciudadanos D铆az y G贸mez Guerra.
El ciudadano Ibarra propuso que se llamara oficialmente al profesorado al sal贸n de acuerdos de este H. Ayuntamiento y que all铆 se le hablara y dijera lo que se va a hacer; y que los que quisieran volver a sus trabajos escolares volvieran, y a los que no quisieren, se les diera el cese.
El ciudadano presidente municipal dijo: que le parece muy humillante volver a instar de nuevo oficialmente a los profesores, y que 茅l no lo har铆a aun cuando se lo ordenara la H. asamblea; pero que en lo particular estaba dispuesto a ir nuevamente a suplicarles a uno por uno para que volvieran a sus labores.
El ciudadano G贸mez Guerra manifest贸: que en lo particular y no oficialmente, se excitara al profesorado.
El ciudadano Suro manifest贸: que puesto que ya se les hab铆a pasado a los profesores huelguistas varios oficios muy atentos, suplic谩ndoles que desistieran de su actitud y 茅stos no los hab铆an tomado en cuenta, cr铆a justo que ya no se les rogara porque era muy rid铆culo para el H. Ayuntamiento tanta humillaci贸n y que al efecto propon铆a que se citara a todos los profesores huelguistas al sal贸n de acuerdos de esta H. corporaci贸n y que una vez reunidos el H. Ayuntamiento y los huelguistas, se les interrogara qui茅nes quer铆an seguir en el desempe帽o de sus labores y qui茅nes no, y que una vez definida su actitud, los que estuvieren conformes que volvieran y a los que no se les diera su cese y se substituyeran inmediatamente, puesto que hab铆a un regular n煤mero de profesores vacantes.
El ciudadano Barbosa, insisti贸 en que el ciudadano profesor Ibarra no le hab铆a probado a煤n los cargos que al principio le hizo.
El ciudadano Ibarra le contest贸: que como ya hab铆a dicho el ciudadano Barbosa no se hab铆a declarado ni de parte del gobierno ni de la del profesorado.
El ciudadano Barbosa manifest贸: que esos sofismas no eran de tenerse en cuenta porque la parte del profesorado huelguista no era la mayor铆a sino que la mayor parte de los profesores han permanecido fieles y abnegados en sus puestos.
El ciudadano presidente municipal pidi贸 su opini贸n al ciudadano Mart铆nez quien contest贸: que no quer铆a tomar parte en este asunto durante el curso de la sesi贸n porque cuando 茅l habl贸 de este asunto, expuso su parecer en la parte econ贸mica.
El ciudadano presidente propuso de nuevo a la H. Corporaci贸n que en lo particular har铆a 茅l a los profesores huelguistas esa misma noche la excitativa que se ha propuesto hacerles y no oficialmente, para que ma帽ana siguieran en sus puestos.
El ciudadano Ibarra manifest贸: que no fuera 茅l quien hiciera la excitativa sino otra persona. El ciudadano presidente acept贸 y propuso que el ciudadano D铆az se acercara a los profesores que le hab铆an hablado y los convenciera de la conveniencia de que contin煤en en sus labores escolares.
El ciudadano Castrej贸n manifest贸: que parece que no hay humillaci贸n de parte del H. Ayuntamiento hac铆a los profesores y que si la hubiere los profesores la entend铆an bien y creer铆an que era acuerdo tomado por este H. Ayuntamiento, puesto que el cerebro de un cuerpo es el que discute y resuelve los asuntos que se le proponen.
El ciudadano presidente municipal propuso que el ciudadano D铆az invite a los profesores huelguistas y les manifieste que si gustan volver a sus trabajos, el H. Ayuntamiento tendr铆a mucho gusto en aceptarlos.
Discutido este asunto y puesto a votaci贸n, se tom贸 por unanimidad el acuerdo de que el ciudadano D铆az invite al profesorado huelguista a que contin煤e en sus labores y muy particularmente a aquellos profesores que le han manifestado volver铆an a hacerse cargo de sus empleos y que los que no aceptaran, se substituyeran de acuerdo con la lista que al efecto se present贸, autoriz谩ndose al ciudadano Presidente Municipal para que substituyera a los profesores que no aceptaran la invitaci贸n.